-Vamos a matar este amor, por tu bien y por el mío- se dijeron ellos
El sentimiento tembloroso y mutante, habitante de un mundo irrazonable, tomo la soga...era culpable.
Lágrimas caían de sus ojos, lágrimas de sangre y vida que se negaban a morir.Culpable de amar sin razón y sin motivo alguno, culpable de persistir en su agresión, lastimando e hiriendo parásito que vive de las emanaciones eléctricas de mi pulso y de mi voz. Ese sentimiento mascota, compañero ya de años, se calzó la cuerda y se precipitó al vacío.
Y prosiguió así suicidándose día tras día, obedeciendo al mandato de su creador/a.
Sólo el deseo...mito de su origen. Más no bastó el deseo para matarlo. Persiste, clavando sus dulces clavos, vibrando...
-Ya me acostumbré a él-susurró ella- déjalo quedarse en esa esquina, es evidente que no ha de marcharse.
Pero él tejía anhelos y música, creando...este sentimiento mascota nació, creció y se hizo matriz mágica y dolorosa de su arte...
Coló sus pensamientos, coció sus visiones, besó y humedeció cada instante...
-Tratamos de matarlo como fuere...más no fue posible.
Thursday, August 30, 2007
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2 comments:
El amor se muere a veces pero matarlo es imposible.
Besos.
"lo golpes duelen, la vida mata"
Nadie se muere de amor pero a veces se pìerde la partida.
Me gusta lo que escrines en este blog
saludos!
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